Sobredosis de cafeína ¿Cuáles son los síntomas y qué hacer en su caso?

“En su justa medida” suele ser la respuesta a la pregunta de cuál es la cantidad adecuada que debemos ingerir de este alimento o de aquella bebida. Es cierto, en el consumo moderado está la clave. Ni mucho, ni poco. Solo así nuestro cuerpo aprovechará las ventajas que aporta una dieta equilibrada sobre nuestra salud. En el caso del café, la evidencia científica ha demostrado su efecto protector, poniendo fin a numerosos bulos que cuestionaban los beneficios de esta sustancia. Claro que, tomar más tazas de la cuenta puede provocar una sobredosis de cafeína e incumplir, por tanto, con la regla de la justa medida. 

“La cafeína es un componente que produce un efecto estimulante para el sistema nervioso porque bloquea los receptores de las moléculas que nos inducen a un estado de sueño”, explica Paula Hinke, miembro de la Comisión de Educación Alimentaria del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunidad Valenciana (CODiNuCoVa). Por esta razón, la especialista señala que, ante un exceso de esta sustancia, se produce “un estado de agitación nerviosa que nuestro cerebro no puede regular como haría normalmente”.   

Sobre la cantidad específica de cafeína que defina una sobredosis, dependerá de la tolerancia individual. Sin embargo, como apunta Naiara Carretero, presidenta del Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Castilla y León (CODINUCyL), la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha establecido unas referencias sobre la ingesta segura de cafeína.

• Para la población adulta sana, el consumo de hasta 400 mg de cafeína (entre cuatro y cinco tazas de café) a lo largo del día no tiene efectos perjudiciales en la salud. Esto se traduce en unos 5,7 mg por cada kilo de peso corporal.
• Para las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, las ingestas de hasta 200 mg no representan un peligro para la salud del feto.
• En una sola dosis, se considera seguro hasta 200 mg de cafeína, tanto en adultos, como en niños y jóvenes. 

Síntomas de una sobredosis de cafeína

Son varios los signos que podrían indicar una sobredosis de cafeína. Las expertas consultadas por CuídaetPlus apuntan los siguientes:

• Elevación del pulso.
• Temblores.
• Irritabilidad y nerviosismo.
• Ansiedad.
• Insomnio.
• Mareos y náuseas.
• Dolor de cabeza.
• Malestar digestivo. 

"El consumo excesivo y crónico de cafeína puede tener efectos negativos a largo plazo en nuestra salud. Algunas de las consecuencias pueden incluir trastornos del sueño, desequilibrios en el estado de ánimo, aumento del riesgo de osteoporosis, alteraciones en la absorción de nutrientes, dependencia física y psicológica, y mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares", subraya Carretero. 

¿Qué hacer si sufrimos sobredosis de cafeína?

Saber cómo proceder ante una sobredosis de cafeína dependerá sobre todo de los síntomas que experimentemos. En este sentido, Hinke comenta que los casos de intoxicación grave no son frecuentes, pero en caso de duda, sobre todo si lidiar con los síntomas resulta complicado (por ejemplo, presencia de vómito recurrente sin posibilidad de rehidratación), “lo mejor es acudir a nuestro centro médico más cercano para prevenir complicaciones más graves”.   

Sobre el vómito reiterado, la nutricionista indica que “puede producirse un desajuste electrolítico, ya que se pierde una importante cantidad de agua y minerales, como el potasio, que son indispensables para el funcionamiento de nuestro cuerpo”. En este punto, resalta que “lo único que podemos hacer ante un caso grave es tratar de paliar los síntomas hasta que nuestro cuerpo metabolice el exceso de cafeína”. 

Consejos para moderar el consumo de cafeína

Dejar de tomar cafeína de repente no es recomendable porque, como ya se ha indicado, puede desencadenar síndrome de abstinencia. “Si estamos acostumbrados a tomar todos los días bebidas con cafeína, lo ideal siempre es reducir gradualmente. Optar por versiones descafeinadas también ayuda”, manifiesta Hinke, aunque recuerda que, en realidad, estas bebidas también contienen cafeína, solo que en menor cantidad. 

Carretero sugiere optar por alternativas más saludables como el té verde, que contiene menos cantidad de este componente, pero proporciona antioxidantes beneficiosos y recuerda: "No solo el café contiene cafeína, también el té, los refrescos, el chocolate, los energéticos y algunos medicamentos". 

Sobre los beneficios que pueda tener un consumo moderado de cafeína, la nutricionista de distingue los siguientes:

• Estimulante y aumento de la energía. Puede mejorar la concentración, el enfoque y el estado de alerta.
• Mayor rendimiento físico al ayudar a reducir la percepción de esfuerzo y aumentar la resistencia. Además, puede retrasar la fatiga muscular y mejorar el tiempo de reacción.
• Incremento de la tasa metabólica, lo que implica una mayor quema de calorías. Esto puede ser beneficioso para aquellos que desean mantener un peso saludable o perderlo.
• Mejora de la función cognitiva. Se ha observado que esta sustancia mejora la memoria, el tiempo de reacción, la atención y la función cognitiva en general. Puede ser especialmente útil en situaciones que requieren un rendimiento mental óptimo.
• Efecto antioxidante. La cafeína es un antioxidante natural que protege al cuerpo contra el estrés oxidativo y reduce el riesgo de enfermedades crónicas, como aquellas cardíacas, así como ciertos tipos de cáncer.
• Promueve la salud hepática. Estudios sugieren que el consumo moderado de cafeína puede estar asociado con un menor riesgo de enfermedad hepática. 

Eso sí, Hilke insiste: “Si queremos continuar beneficiándonos de su efecto estimulador, conviene no abusar ni depender de ella. Cuanto más la consumamos, más rápido la metaboliza nuestro cuerpo, reduciendo su efecto”.